sábado, 21 de marzo de 2009

La estrategia de la ramita

Debió haber salido de una Sala Situacional o del dormitorio de un noctámbulo, una estrategia, idea genial, después una orden: Guerra!

Según el análisis que hace unos días Rafael Poleo nos regaló sobre las acciones futuras del gobierno, este suavizaría su discurso, seduciría y sobornaría a algunos líderes de oposición para que bajaran el dedo acusador: El impacto es inminente y el culpable no puede ser otro, está clarito.

Pero esta vez creo que se equivocó. El militar planteó la cuestión en los únicos términos que conoce y en los que fue formado. Se buscó un enemigo, lo amenazó, lo humilló y lo atacó de la manera más ventajista y cobarde, se valió del despreciable oponente para construir un drama bélico de conquistas y ocupaciones que fuera risible si no fuera por lo grave.

El numeral 10 del 164 de la Constitución no puede ser más claro, no hay lugar a interpretaciones ni medias tintas, la competencia sobre carreteras, puertos y aeropuertos es de los estados, cualquier contravención es un delito y como tal deberá ser juzgado. En base a conjeturas crearon una excusa subjetiva a la medida para desobedecer nuestro contrato de convivencia. ¿Responsabilidades? De bolas que las FAN son las peor paradas, porque de manera franca nos están diciendo que ya no defenderán la constitución, su interés y compromiso es el de mantener a un tipo en el poder, sin importarles su futuro o el de los venezolanos. Al igual que el presidente, para ellos sólo existe la mitad roja del país.


Alzó el puño y señaló cual Zorro del Desierto, lanzó sus tropas sobre el Zulia y sus bastiones, sobre aquellos estados corrompidos por la eficiencia, infestados de profesionales, enfermos de buena gestión. Y las focas temblaron, corrieron y se agruparon, prestos mostraron su rostro más servil, bajaron la cabeza y jalaron bola parejo, en el habitual festín pornográfico.

Vamos a meter preso a Rosales! Te voy a desaparecer del mapa desgraciao'! Gritó Mussolini. Quizás los chavistas lo crean así, pero un presidente no puede mandar a meter preso a nadie, sus atribuciones están mejor y más cuidadosamente delimitadas que las de un ciudadano común y entre estas no cuentan las prerrogativas penales. Pero que diablos! esto es la República Bananera de Venezuela, aquí se hace lo que le de la gana y se apresuraron a obedecer.

Escuché a la nueva adalid de la moral, María de Queipo, construyendo argumentos que harían palidecer hasta a el mismo Sócrates: "La oposición debe dejar el discurso político en este caso, pues se trata de una cuestión jurídica y moral". Te voy a desaparecer del mapa desgraciao'! Gritó Mussolini.

Sobre Giancarlo DiMartino (ex alcalde chavista de Maracaibo) fueron interpuestas más de 35 denuncias documentadas en la Asamblea Nacional por representantes de Un Nuevo Tiempo, sobre Juan Barreto hizo lo propio Primero Justicia, Wilmer Azuaje investigó descomunales casos de corrupción desde la misma Asamblea, hizo lo mismo Tascón Apartheid. La lista de denuncias y bacanales de corrupción sobrepasa todo lo anteriormente conocido en la historia democrática de Venezuela y ¿a cuál chavista han metido preso?, por otro lado ¿A cuántos opositores y/o disidentes?, como dice la chica socialista: "saca tu cuenta".


Todo este arrebato bélico, este tinglado exacerbado de opresión y abuso, toda esta burla a la voluntad popular y a nuestro contrato social tiene un propósito simple a mi parecer: A pesar del esquizoide "Estamos blindados", ya saben que la crisis será terrible, no por el derrumbe del capitalismo, sino porque simplemente no hubo una política de ahorro. El despilfarro y la regaladera fueron tales que no queda un centavo, entre otras "medidas" están vendiendo el oro, Rafael Ramírez está hipotecando nuestro futuro en Asia para cubrir el hueco. Sin ínfulas de pitoniso creo que la estrategia es caldear los ánimos, tumbarle la ramita del hombro a los zulianos, abusar, imponer, prender la mecha. Así se moverán en el escenario que conocen: La confrontación visceral.

Quieren sublevar a la mitad apátrida, oligarca y traidora del país, acto seguido enfrentarlos con su poder represivo -tan valientes ellos- y luego decir: "Este desastre fue causado por el accionar violento de los fascistas y golpistas vendepatria. El culpable no puede ser otro, está clarito."

No digo que esto vaya a suceder, esto es lo que creo que quieren que suceda.

Ya los rojos estan de su cuenta, ya no les interesa un coño y llega un punto en que la intoxicación de poder es tan grande que se olvidan de la historia y sus avatares. Sabiéndose invencibles se mean en las consecuencias sin tomar en cuenta la rotación de las circunstancias. No creo en la justicia divina, no creo siquiera que exista la justicia, lo que sí existe es la dinámica social y política, frecuentemente lo que sube, baja. Tendrían que estar locos para no temer de los opacos reflejos que abundan en la historia de los totalitarismos.

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